En el Líbano, el perro tenía cinco años. Como resultado de su lesión, tuvo una mandíbula rota, orejas cortadas y ojos pinchados. Estaba atada sola a una caja de cartón cuando descubrieron que estaba esperando un bebé.
La Fundación Wild at Heart se enteró de la pobre perra y la llevó a una casa en Brighton de una persona que adora a los animales. El nombre de esa persona es Kasey.
Maggie es una perra sencilla, como los demás perros, se comporta con normalidad, aunque la excavación tiene asuntos relacionados con la salud. El dueño del perro dijo que el perro es talentoso y genio.
Ella es muy vivaz y juguetona. Ella siempre lidera a su dueño. ¡Qué fuerza, qué resistencia muestra a todos que no se rendirá hasta que el buen señor se la lleve! Ella es una cachorra increíble con un coraje, una fuerza y unas ganas de vivir inimaginables… ¡una gran inspiración para todos nosotros!