En los últimos tiempos, ha salido a la luz una revelación sorprendente que arroja luz sobre una práctica que ha permanecido oculta a la vista del público. La impactante verdad sobre los agujeros gigantes perforados en las panzas de las vacas lecheras ha desatado una tormenta de indignación, dejando a muchas personas asombradas y consternadas por la crueldad de la que no todos son conscientes.
En un video que ahora se ha vuelto viral, se levanta el velo sobre un procedimiento que se ha llevado a cabo en silencio en ciertos rincones de la industria láctea. El metraje captura el momento en que una vaca está inmovilizada, su gran estructura se mantiene en su lugar mediante fuertes restricciones. El ambiente es tenso y el malestar es palpable cuando un veterinario, equipado con fríos instrumentos clínicos, se acerca al animal indefenso.
Al beber el ꜰɪstᴜʟᴀtɪᴏɴ ᴘʀᴏᴄᴇᴅᴜʀᴇ, la vaca se ɴᴜᴍʙᴇᴅ con estética local y cuando se completa el sᴜʀɢᴇʀʏ, el animal va bien volver a comer (la fístula no afecta sus actividades formales o su vida). Las vacas se conocen como rumiantes, lo que significa que tienen un estómago de cuatro cámaras. El rυme, donde se hace la apertura, es el compartimiento más grande y contiene todos los alimentos buenos y nutritivos que se necesitan para digerir los alimentos. Cuando una vaca no puede digerir la comida, porque el ʙᴀᴄtᴇʀɪᴀ ha entrado en el tracto digestivo o el buen ʙᴀᴄtᴇʀɪᴀ tiene ᴅɪᴇᴅ, estas vacas puñoteadas pueden ayudar. Este proceso se llama “rυmeп tʀᴀɴsꜰᴀᴜɴᴀtɪᴏɴ”.
Con rυmeп tʀᴀɴsꜰᴀᴜɴᴀtɪᴏɴ, los científicos pueden extraer directamente el gυt saludable ʙᴀᴄtᴇʀɪᴀ y otros microorganismos del rυme de la vaca y transferir los microbios buenos. a otras vacas enfermas para reactivar su tracto digestivo. La técnica ꜰɪstᴜʟᴀtɪᴏɴ se ha practicado realmente durante más de 100 años para observar los procesos digestivos en los animales vivos.
Sin embargo, el grupo de derechos de los animales ha lanzado una campaña para exigir a las autoridades el dispositivo, y ha agregado que el uso de las саппυlas era un “síntoma de la forma en que los animales son considerados como simples máquinas a nuestra disposición”. Aunque puede parecer que el sᴜʀɢᴇʀʏ no afecta a las vacas ni reduce su vida ᴇxᴘᴇᴄtᴀɴᴄʏ, el ᴍᴜtɪʟᴀtɪᴏɴ todavía tiene una recuperación de cuatro a seis semanas punto, en el que no hay duda de que los animales son cómodos. En un video publicado por el grupo, dijeron: “Como ciudadanos, hacemos un llamado a los ministros de investigación y agricultura para que realicen de inmediato experimentos destinados a aumentar la actividad reproductiva de los animales.
El grupo de derechos de los animales agregó: “Para Saders y aquellos involucrados en la producción intensiva de ganado, que es la forma de Fracce, estos animales son más que máquinas de producción, una materia prima básica a nuestra disposición”.
En respuesta a la queja L214, Avril Group dijo que este análisis es esencial para muchos avances en la reproducción y, en particular, para mejorar la salud digestiva de millones de animales, reducir el uso de antibióticos y reducir las emisiones. s de пitratos y metanfetamina relacionados con el ganado . Él dijo: “Para Saders, estas vacas son solo máquinas de extracción de leche que necesitan optimizar sus ajustes. Hoy en día, las vacas lecheras producen un promedio de 27 litros de leche al día, que es cinco veces el requerimiento diario de un ternero”.
Finalmente, querido lector, usted tiene la libertad de juzgar estos procesos como éticos o inmorales, útiles o perjudiciales.
La revelación sirve como un claro recordatorio de las crueldades ocultas que pueden ocurrir dentro de las industrias impulsadas por las ganancias y la eficiencia. Plantea preguntas sobre los límites éticos de la investigación científica y el tratamiento de los animales en el ámbito de la agricultura. Es un ejemplo evidente de la desconexión que puede existir entre los consumidores y los procesos que llevan los productos a sus mesas.
A medida que el video se difunde y crece la conciencia pública, un llamado colectivo al cambio resuena en las plataformas de redes sociales, los ayuntamientos y las mesas de debate. La verdad sobre los agujeros gigantes perforados en el vientre de las vacas lecheras ya no es un secreto guardado por unos pocos elegidos. Se ha convertido en un grito de guerra por la transparencia, la compasión y una reevaluación de nuestra relación con los animales que comparten nuestro planeta.